Me ha llamado la atención una noticia aparecida en el diario Hoy, no se trata de inauguraciones, de valoraciones de fiestas si no de solidaridad.

Me entristece que no me asombra que no haya habido respuesta por parte de las Instituciones como  la Junta de Extremadura, el Ayuntamiento ni siquiera el Obispado, si estos que nos piden que hagamos una cruz en nuestra declaración de la renta. Ellos tampoco.

Es la lucha de unos padres, de unos niños  que luchan para que  conseguir un ascensor en el  colegio San Calixto para que Enrique y sus compañeros tengan acceso a las plantas superiores del colegio. Enrique tiene una enfermedad degenerativa, pero Enrique es un niño que muy joven sufre con las barreras arquitectónicas esas que no deberían impedir  a nadie desarrollar su vida normalmente.

Es vergonzoso que las instituciones no tengan humanidad y no respondan al llamamiento de unos padres que imagino se están dejando la piel para hacer la vida de su hijo más fácil. ¿Qué ejemplo les estamos dando a los niños si los adultos no responden? Los niños son como esponjas y espero que de esta lucha saquen lo positivo que hay gente que se vuelca desinteresadamente sin una foto a cambio.

Hay que unirse al Proyecto Fuera Barreras.

Un saludo para Enrique y para sus padres.

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