Cuando era pequeño viajaba mucho a Huelva con mi padre. El es un apasionado de los trenes. Cuando íbamos a una ciudad en seguida buscaba una estación, le encantaba el mundo ferroviario. Yo creo que le hacían recordar sus años de postguerra cuando era un chavalín y viajaba a Salamanca medio de incógnito, camuflado y se traía algunos artículos que aquí en Plasencia no había, el café y otros productos entonces eran muy codiciados y el ayudaba a la familia de alguna manera con sus “inocentes viajes”.  Así que íbamos a Huelva y nos enseñaba los trenes, el nos dijo ¡mirad  eso es la catenaria! y le preguntamos ¿y eso qué es? Es como un cable que  lleva la electricidad a la locomotora. Así nos explicó sencillamente que aquellos trenes eran eléctricos. ¡Estoy hablando de hace 30 años!

Aquí sin embargo teníamos una estación que nos unía con el norte de España, podías coger el tren e ir a Salamanca a La Coruña. Mucha gente iba, por que la carretera era catastrófica, ahora están acometiendo la obra de la autovía.  La estación de Plasencia acabó convirtiéndose en un apeadero y después ya aquellas locomotoras de gasoil casi han dejado de circular por esta ciudad. Te tienes que desplazar a Palazuelo Empalme, un punto perdido en el mapa que no se entiende como acabó siendo la estación de esta zona norte de Extremadura.

Aquí jamás hemos visto llegar una locomotora con su catenaria, pues ya no tenemos ni tren. Ahora quieren poner una línea de alta velocidad, un AVE y los vecinos queremos que en Plasencia haya una estación. La cosa está difícil  pues a estas alturas del partido personalmente pienso que esta decidido donde va a ir esa estación. No se acomete una obra de semejante calado y se deja al azar a la inspiración divina cuestiones como donde va cada estación.

Ahora nuestra alcaldesa ha ido a al Ministerio de Fomento. Ve que el pájaro se le escapa de las manos y supongo busca justificación alguna, si es que alguna vez ha justificado su nula actuación como alcaldesa.

Otra vez más pasará el tren de largo en la vida de Plasencia y los placentinos seremos nuevamente perdedores, ese tren salió hace mucho tiempo.

Yo siempre recordaré la palabra catenaria y las tardes que pasé junto a mi padre en la estación de Plasencia viendo llegar los trenes.